Tomo I, Sección V
El asunto acerca del vital emocional y el superior es un poco difícil. En la clasificación en la que la mente es más que una inteligencia volitiva pensando y percibiendo, la emocional puede ser contada como parte de la mente, el vital en el mental. En otra clasificación es la parte más mentalizada de la naturaleza vital. En el primer caso, el término ‘vital superior’ es limitado a ese gran movimiento de la consciencia, la fuerza de la vida, que tiene por interés o se preocupa de la creación, del poder, la fuerza y la conquista, del dar y el darse a si misma y el colectar del mundo para una futura acción y gasto de poder, lanzándose ella misma en movimientos de la vida más amplios, respondiendo a unos objetivos mayores de la Naturaleza. En el segundo arreglo, el ser emocional se mantiene en lo más alto de la naturaleza mental y lo dos juntos hacen el vital superior. Como también sus opuestos que están situados en el vital inferior y se preocupan de los movimientos de acción y deseo más lastimosos, alargándose hasta el vital físico donde ayuda la vida de las actividades más externas y todas las sensaciones, hambres, antojos y satisfacciones físicas. El término ‘inferior’ no debe considerarse de condición o calidad peor; él se refiere solamente a la posición en la jerarquía de los planos. Porque aunque esta parte de la naturaleza en los seres terráqueos tiene la tendencia a ser muy oscura y llena de perversiones, – la lujuria, los egoísmos de todas clases, la vanidad, las pequeñas ambiciones, la cólera mezquina, la envidia y los celos son sus huéspedes comunes, – todavía hay otro lado de ella que la hace un mediador indispensable entre el ser interno y la vida externa.
No es un hecho, que cada experiencia psíquica incluye en si misma una corriente vital directa perfecta y purificada /limpia; eso ocurre cuando ella tiene que exteriorizarse en acción. La experiencia psíquica es en si misma una cosa completamente independiente y tiene sus propias formas características. El ser psíquico está parado detrás de todos los otros; su fuerza es el verdadero poder del alma. Pero si él sale al frente, el puede impregnar todo el resto; la consciencia mental, la vital y la física pueden coger su impresión y ser transformadas por su influencia. Cuando la naturaleza se desarrolla propiamente, hay un psíquico en el mental, un psíquico en el vital y un psíquico en el físico. Es cuando él está ahí fuerte, que nosotros podemos decir que alguien evidentemente tiene un alma. El centro del ser psíquico está detrás del centro del ser emocional; es el emocional el que está cerca del psíquico dinámicamente y en la mayoría de los hombres es a través del centro emocional que él psíquico puede ser más fácilmente alcanzado. Por lo tanto, muchos confunden el uno con el otro; pero hay un mundo de diferencia entre los dos. Las emociones normalmente son vitales en su carácter y no son parte de la naturaleza psíquica.
Debe de recordarse, que mientras esta clasificación es indispensable para la disciplina, la práctica y el conocimiento psicológico propio, ella puede ser usada todavía mejor cuando no es rígida y no se hace una fórmula de ella. Porque las cosas se encuentran unas con otras y el sentido sintético de estos poderes es tan necesario como el analítico. Por ejemplo, la mente, está en todas partes. La mente física está situada técnicamente, debajo de la vital y sin embargo es, propiamente dicho, una prolongación de la mente, y puede actuar en su propia esfera por un toque directo con la inteligencia mental superior. Hay también, una mente oscura del cuerpo, una mente de las mismas células, moléculas y corpúsculos. Haeckel, el alemán materialista, habló en alguna parte de la voluntad en el átomo, y la ciencia recientemente, tratando con la variación individual incalculable de la actividad de los electrones, llega casi a percibir que esta no es una forma sino una sombra arrojada por una realidad secreta. Este cuerpo - mente es una verdad muy tangible; debiendo su oscuridad y su apego mecánico a movimientos pasados, al olvido fácil y al repudio de lo nuevo; encontramos en él uno de los mayores obstáculos para la penetración de la Fuerza de la supermente y la transformación de las funciones del cuerpo. Por otra parte, una vez que se ha transformado eficazmente, él será uno de los más preciados instrumentos para la estabilización de la Luz y la Fuerza supramental en la Naturaleza material.
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No es posible decir con precisión cual será la resistencia en las partes vitales superiores, cualquiera que sea la forma que tome, porque puede tomar diferentes formas en naturalezas diferentes. Es completamente normal que debe de haber alguna resistencia en casi todos los grados del descenso de la consciencia superior; porque las diferentes partes de la presente naturaleza están cada una más o menos apegadas a su propia forma establecida de ver, actuar, sentir y reaccionar a las cosas y a los movimientos y formaciones habituales de su propio dominio que cada individuo ha hecho por si mismo en su vida pasada o presente. Lo que se necesita es una plasticidad general de la consciencia mental, vital y física, una disposición o capacidad para renunciar al apego de esas cosas y aceptar lo que sea que la consciencia superior nos traiga con ella, por muy contrarias que sean las ideas, los sentimientos y los hábitos de la naturaleza que uno haya recibido. Mientras mayor sea la plasticidad en cualquier parte de la naturaleza, la resistencia será menos.
Cuando digo las partes vitales superiores de la naturaleza yo quiero decir la mente vital, la naturaleza emocional, la fuerza - vida dinámica en el ser. La mente vital es la parte del ser vital que construye, planea, imagina, arregla las cosas y los pensamientos de acuerdo a los empujes de la vida, a los deseos, a la voluntad de poder y posesión, a la voluntad de acción, a las emociones y a las reacciones del ego vital de la naturaleza. Ella debe ser distinguida de la voluntad razonadora que planea y arregla las cosas de acuerdo con el dictado de la mente pensante propiamente, de la razón discriminatoria o de acuerdo con la intuición mental o el discernimiento o juicio directo. La mente vital usa el pensamiento para el servicio no de la razón sino del empuje de la vida y el poder de la vida y cuando ella llama a la razón la usa para la justificación de los dictados de esos poderes y para imponer esos dictados a la razón en vez de gobernar la acción de las fuerzas de la vida por la voluntad discriminatoria. Este vital superior con todos sus partes está situado en el pecho y tiene el centro cardiaco como su santuario o refugio principal gobernando todas estas partes hasta el ombligo. No necesito decir nada acerca de la naturaleza emocional, porque su carácter y movimientos son de todos conocidos. Desde el ombligo hacia abajo está el reino de las pasiones y sensaciones vitales y todos los pequeños impulsos de la vida que constituyen la mayor parte de la vida y el carácter del humano común. Esto es lo que nosotros llamamos la naturaleza vital baja o inferior. El Muladhara es la ayuda principal de la consciencia física y las partes materiales de la naturaleza.
El antarãtman es el alma, la porción del Divino que está en la base más recóndita del individuo que está evolucionando, y que ayuda a la mente, a la vida y al cuerpo, que son las partes instrumentales de la naturaleza a través de las cuales él trata de crecer de la Inconsciencia material hacia la Luz divina y la Inmortalidad que son su propio ser. Las limitaciones de sus instrumentos le imponen a él una aceptación de los movimientos inferiores y un compromiso entre el alma y la naturaleza que retarda estos movimientos inclusive aun cuando ella obtiene los medios de avance de ese intercambio. El ser psíquico es la forma - alma o la personalidad del alma desarrollándose a través de esta evolución y pasando de vida en vida hasta que todo esté listo para la evolución superior más allá de la Ignorancia.
La realización del ser psíquico, su despertar y su salida al frente, depende principalmente de la extensión por la cual uno puede desarrollar una relación personal con el Divino, una relación de Bhakti, de amor, de darse a si mismo y del rechazo de la insistencia de la separación y de la propia afirmación del ego mental, vital y físico.
Yo puedo decir muy poco acerca de la última pregunta. Sanatkumar es, yo creo, uno de los cuatro hijos nacidos de la mente de Brahma; por lo tanto, él no puede ser idéntico a Skanda que es el hijo de Shiva.
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El ser emocional es en sí mismo una parte del vital.
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El corazón es el centro del ser emocional y las emociones son movimientos vitales. Cuando el corazón se purifica, las emociones vitales cambian en sentimientos psíquicos o de otra manera movimientos vitales psíquicos.
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Los pensamientos, las emociones y los impulsos puros y verdaderos pueden alzarse desde el vital, la mente y el corazón humanos, porque todo no es diabólico allí. El corazón puede ser impuro pero eso no quiere decir que todo en él es impuro.
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Sobre el corazón está la mente vital, pero el levantamiento de la sensación es más bajo que el de la emoción, no más alto.
La sensación está más cerca del físico que la emoción.
El lugar del deseo en el vital central (el ombligo) y en el vital inferior, está debajo del corazón, sin embargo él mueve la emoción y la mente vital.
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Yo hago la distinción [entre los movimientos del vital inferior y las emociones del corazón] notando de donde esas cosas provienen o comienzan. No hay duda que la ira, el miedo y el celo tocan el corazón al igual que ellos tocan la mente, sin embargo, ellos se alzan desde la región del ombligo y las entrañas (ejemplo: el bajo o el más alto del vital medio). En "El Secuestro", Stevenson tiene un pasaje sorprendentemente notable donde el héroe nota que su miedo es sentido principalmente no en el corazón sino en el estómago. El amor, espera tener su asiento primordial en el corazón, así mismo con la lástima etc.
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El regocijo es un sentimiento vital, como su opuesto el pesar.
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Pero ¿es cierto que inclusive la ira que es lo más bajo de lo vital y por lo tanto está más cerca del cuerpo, invariablemente produce estos efectos?1 Por supuesto, que los psicólogos no pueden saber que otro hombre está enojado a menos que él enseñe señales físicas, pero también él no puede saber lo que un hombre está pensando a menos que el hombre hable o escriba – entonces, ¿resulta que el estado de pensamiento no puede ser "imaginado" sin enseñar una señal hablada o escrita? Un japonés que está acostumbrado a controlar todas sus "emociones" y no da ningún signo de ellas (si él está enojado, el primer signo que usted tendrá de ello es el cuchillo, de un asesino calmado y sonriente, en su estómago) él no tendrá ninguna de esas cosas cuando esté enojado, ni siquiera la "ebullición" de su pecho, – en su lugar habrá un fuego continuo que arderá hasta que su furia brote en una acción.
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Un vital fuerte es uno que está lleno de la fuerza de la vida, tiene ambición, coraje, gran energía, una fuerza para la acción o la creación, un movimiento largo y expansivo ya sea para dar por generosidad o para la posesión, la guía y el dominio, el poder de lograr y materializar – también hay muchas otras formas de la fuerza vital. Es difícil frecuentemente para tal vital el rendirse a si mismo debido al sentido de sus propios poderes – pero él lo puede hacer, él llega a ser un instrumento admirable para el trabajo Divino.
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No, un vital débil no tiene fuerza para la transformación espiritual – y al ser débil, cae más fácilmente bajo las influencias erróneas, e inclusive cuando él quiere, encuentra difícil aceptar cualquier cosa más allá de su propia naturaleza habitual. El vital fuerte, cuando la voluntad está allí, lo puede hacer mucho más fácil – su dificultad central es el orgullo del ego y la atracción de sus poderes.
El pecho tiene más conexión con el psíquico que el vital. Un vital fuerte puede tener una buena psiquis, pero como pasa frecuentemente él no lo tiene – él depende mucho del físico y se alimenta de él como si lo fuera.
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Yo pienso que lo dije [un viejo deseo] eso estaba en la parte subconsciente del vital físico. Como hay una mente física, también hay un vital físico – un vital movido enteramente por las cosas físicas, llenos de deseos y egoísmos y buscando por placeres en el plano físico.
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